“La carta orgánica avala su expulsión”

Andalgalá © Fueron las declaraciones de Valeria Cabrera, flamante presidenta de la Juventud Radical de Andalgalá, quien además expresó que realizará un pedido formal para que se “vea” la situación de Alejandro Páez.
“Él dice que es radical pero fue candidato por otro partido, por eso no está clara la situación”, dijo Cabrera. Asimismo, la dirigente, manifestó que “queremos plantearle a la señora Grimaux de Blanco la situación del intendente electo, ya que la carta orgánica avala su expulsión por haber sido candidato de otro partido” (Se trata de Proyecto Sur que finalmente se quedó con la intendencia de Andalgalá).

La situación del radicalismo andalgalense era bastante complicada antes de 13 de marzo y ahora es peor. No entendemos cuáles serán las funciones de este sector partidario que ahora conduce Valeria Cabrera, teniendo en cuenta que los radicales, literalmente, se han mandado a guardar y no aparecen por ningún lado. Hasta aquellos que se decían parientes del Gobernador y principales operadores y se pavoneaban con ese título, bajaron el perfil y están políticamente acabados, seguramente abochornados por los papelones que se generan en la Casa de Gobierno.

El planteamiento que realizaría Cabrera ante la presidente del comité provincia debería hacerse extensivo también para José Luis Cativa, potencial presidente del Concejo Deliberante local, si se destraba el intríngulis planteado por Gloria Peña del Proyecto Sur. Mientras se hacen declaraciones periodísticas, a los funcionarios electos por ese partido, nada parece preocuparles y se los ve ir y venir muy tranquilos en procura de poder “armar” un gabinete.

Si a Grimaux de Blanco no le importó Andalgalá antes de la derrota, menos le importará ahora que va camino a su extinción política, partidaria y hasta social, porque seguramente entendió que el 10 de diciembre comienza un nuevo orden en el que no habrá privilegios ni prebendas y el pueblo será el verdadero protagonista. Está bien lo que manifiesta Valeria Cabrera, pero sería bueno que comprenda que no se debe gastar pólvora en chimangos y que soldado que huye sirve para otra batalla.

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