Andalgalá © Desde el 13 de marzo a la noche, fecha clave para la construcción de la Nueva Catamarca y apenas conocidos los resultados de la elección provincial, el departamento Andalgalá se ha quedado sin senador, es decir, sin una voz que defienda sus intereses en la Cámara Alta, ya que el sujeto que ocupa el cargo, un tal Mario Scaltritti, literalmente se ha dado a la fuga y nadie, nunca más supo nada más de él.
Si durante estos últimos cuatro años de mandato, la gestión del tal sujeto fue anodina o nula de nulidad total, generada por la permanente ausencia, desde marzo, directamente no volvió nunca más a ver cuáles son las necesidades de la gente que supuestamente representa.
Es más, se supo hace poco que apenas elegido senador, fijó domicilio en la Capital, limitándose a venir esporádicamente, a juntarse con unos amigotes afines en pensamiento, obra y omisiones.
Lo más graves es que –según nos comentaron algunos que lo escucharon- antes de partir, Scaltritti habría dicho enfurecido y a viva voz, que no vendría más a “este pueblo de m…”, a lo que la población aplaude sin parar desde entonces, total…para lo que sirvió…y lo imagina sumido en la depresión del fracaso, la misma que hoy tienen sobre todo, Brizuela del Moral y Javier Silva.
Pero Andalgalá necesita, y así lo establece la Constitución, un senador. El que hoy no
Fuente Catamarca Actual