El ministro Silva no descartó una conciliación obligatoria y se mostró preocupado por posible “virulencia” en las manifestaciones de esta semana. Los gremios ratificaron su plan de lucha.
Sin mayores avances ni acuerdos se cristalizó, este mediodía, la reunión prevista entre el Gobierno provincial y la Intersindical gremial, siendo la falta de acuerdo para un posible aumento salarial el principal obstáculo para superar el prolongado conflicto que mantienen ambos sectores.
El encuentro se desarrolló en instalaciones del Ministerio de Educación, donde estuvieron representando al Ejecutivo provincial los ministros de Educación y de Gobierno, Eduardo Galera y Javier Silva, respectivamente. La Intersindical estuvo liderada por los responsables de los gremios docentes y de ATE, entre otros, y ratificó su plan de lucha.
Al término del encuentro, el ministro Silva relativizó los resultados del encuentro, en función de la postura inflexible de parte de algunos miembros del sector gremial y si bien no descartó el llamado a una eventual conciliación obligatoria con el sector docente, se mostró preocupado por versiones sobre posible “virulencia” en las manifestaciones gremiales previstas para esta semana.
Específicamente, Silva manifestó: “Lamentablemente, ha habido una posición demasiado inflexible por parte de algunos gremialistas, no de todos. Es mas, había tres puntos por resolver, de los cuales a dos de ellos se le estaba dando solución inmediata como era el tema de dejar sin efecto la Circular Nº 05 y el descuento de los días de paro. No obstante, quedaba el tema salarial y, si bien sabemos que es el tema medular, queríamos abrir una instancia de diálogo en función de las pretensiones de ellos y las posibilidades nuestras”.
“Pedíamos una tregua, a los efectos de que cesen con las medidas de fuerza para que los niños regresen a las escuelas y no porque al Gobierno le moleste la gente que se junta en la plaza. Los niños ya llevan bastante tiempo sin clases”, agregó el titular de la cartera de Gobierno al tiempo que aseguró: “Si me preocupó que algunos gremialistas hablaran de virulencias en las movilizaciones, o sea que, evidentemente, algo o alguien esta moviéndose adrede porque no ha sucedido nada todavía, pero ellos hablan de que mañana va a haber una movilización en donde va a haber virulencia y eso preocupa muchísimo. Si hay trasfondo político o no, que cada uno saque las conclusiones…”.
En otro tramo del diálogo con los medios de prensa, Silva explicó que el llamado a una conciliación obligatoria “es una posibilidad”. “Estamos planteando de qué sirve sentarnos a una mesa si hay un diálogo de sordos, por ello la conciliación es algo que se analiza a los efectos de tratar salvar los días de clase para los chicos…”.
“La idea de hablar era para analizar las posibilidades y ver si puertas adentro podíamos proponer algo concreto en la nueva reunión. Ellos (por los gremios) si analizan que la reunión es negativa es su problema, pero nosotros hemos llamado al diálogo en función que hace unos días ellos mismos decían que el Gobierno era sordo y autista y no convocaba al diálogo. Acá se ha planteado una línea de solución, pero con posturas inflexibles no se pueden llegar a acuerdos”, sostuvo el ministro al tiempo que aseguró que el Gobernador Eduardo Brizuela del Moral “esta a la cabeza” de las negociaciones y “en permanente contacto con los ministros”.
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